MEDITACIÓN:CONCIENCIA CONSTANTE
“El hombre que es totalmente consciente, el hombre que está totalmente
en cada momento…ese es el Maestro”.
Cuando uno
escucha la palabra meditación la asocia generalmente a una persona sentada, con
los ojos cerrados, quieta y sin moverse.
Sin
embargo, una persona puede estar perfectamente quieta y su mente encontrarse en
un estado de hiperactividad. Su cuerpo puede estar quieto, pero su mente se
encuentra saltando de un pensamiento a
otro. De la misma manera, una persona puede estar con su cuerpo en
movimiento y su mente perfectamente quieta. Esta actitud tiene que ver
específicamente con la mente.
La
meditación es simplemente observar, ser
consciente de algo. Cuando estoy realizando una asana, debemos
preguntarnos: ¿Cómo me encuentro?, ¿Qué estoy sintiendo en estos momentos?,
¿Qué pensamientos (qué clases de pensamientos: positivos, negativos,
destructores, constructores, etc) estoy teniendo?. Y mi cuerpo: ¿cómo está
reaccionando?: tengo dolor, siento mis propias limitaciones corporales, hoy
estoy cansado, enérgico….observar,
observar, observar. Poco a poco iremos desarrollando esa capacidad innata que todos poseemos y nuestra “vocecita interior”, nuestro “guía
interior” podrá hablar y ser escuchado por nosotros. ¿Cuántas veces nos hemos
saboteado a nosotros mismos haciendo lo que nos decían los demás y desoyendo lo
que decía nuestro corazón?
Esta misma
capacidad de observación hemos de trasladarla a nuestro día a día: ¿cómo me
siento en mi día a día?, en mis
actividades cotidianas: ¿cuándo estoy cocinado, cuándo me relaciono con los
demás, cuándo me relaciono conmigo mism@?.
Recordemos
que el yoga es un camino progresivo en el que hay que ir desarrollando una
serie de cualidades interiores y seguir una serie de recomendaciones hacia uno
mismo y hacia los demás, cómo pasos previos, preparatorios, para alcanzar
estados más profundos de conciencia. Eso es lo que nos indican los “yamas” y
“niyamas” del Asthanga yoga, o sendero de los 8 pasos del yoga. Dentro del
Asthanga yoga, la meditación estaría casi en el último eslabón: en el número 7.
Esto ya nos indica que para meditar hay que tener una preparación previa: después de los “yamas” y “niyamas”,
empezaremos a trabajar el cuerpo: que es lo que tiene una energía más densa.
Luego, entrenar la respiración para ir controlando los pensamientos. Siguiente
paso: interiorización de los sentidos con los trabajos de conciencia corporal.
De ahí, pasaríamos a la concentración y ya, por fin, a la meditación.
Entrenamientos
previos a la meditación: observar sin juzgar, vivir el presente como un mero
testigo de lo que está sucediendo…vivir en el aquí y ahora. Entendiendo que la
vida en sí es perfecta y que nosotros , los seres humanos, somos los
imperfectos, estamos ciegos y somos incapaces de comprender la Gran Realidad de
la Vida que Es.
Nos pasamos
la vida manipulando, queriendo que las cosas sean cómo nosotros queremos que
sean, cómo nos hemos planificado… nos
olvidamos que vivimos en el misterio de la vida, que cualquier cosa puede
suceder en cualquier momento. ¿Dónde está escrito lo que nos tiene que
suceder y porqué?. Tan sólo somos un microcosmos dentro de un macrocosmos,
somos gotas de un mismo mar, hojas de un mismo árbol, una pequeña inteligencia
dentro de una gran Inteligencia que nos dirige y que sabe lo que es mejor para
nosotros, en todo momento.
Para meditar: vivir la experiencia en vez de
pensar, desear o imaginar como ha de ser ésta. Dejar de estar en el pensamiento
y ser testigo del acontecimiento,
independientemente de cuál sea éste y cual sea la acción que se está llevando a
cabo, aunque sea la acción de pelar patatas.
No te
agobies si al principio no consigas los resultados que tú deseas. Recuerda que
es un entrenamiento progresivo. El niño primero aprende a sujetar la cabeza, luego
empieza a gatear, luego a erguirse y andar cogido de algún sitio y luego,
finalmente, se suelta y camina. Ya lo dijo el Buda: todos podemos llegar a ser
Buda, sólo hay que entrenarse cada día un poquito.
Para
meditar hay muchas y variadas “técnicas”, unas activas y otras pasivas, o lo
que es igual, realizadas en quietud o movimiento. Encuentra tú propio camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario